miércoles, 23 de abril de 2014

A la dirección

Muchas veces me quedo pensando y pensando, pasando el tiempo muerto hasta darme cuenta de que quien se va muriendo soy yo, poco a poco, lentamente, muy despacio... pero no tan despacio es cuando llegue ese día en que descubra y me aterrorice a la vez que ha pasado el tiempo tan rápido que me he ido sin dirección.

Y es que aunque a veces uno mismo se permita el lujo o la necesidad de dejarse llevar, no siempre es bueno ir a la deriva si uno nunca sabe hacia donde va...

Que no me exilie a la sin razón...

Que ponga en orden mi cajón...

Y yo le ordeno a la dirección protagonismo como a un actor...